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¿Oiste el trueno?
Si. Las primeras gotas son las mas livianas.
Lavan el aire, solo eso.
Con los minutos, bajan las nubes.
Negro el mar.
Grises las paredes.
Con las horas caen soberanamente,
todas tras todas.
Ahora lavan el auto, mis plantas y el perro.
Con esa soberanía cae la noche.
Si, levantando mi sueño.
Me abre los ojos, los otros ojos.
Me incita a seguir despierto.
Asi, de a poco lava todo mi cuerpo.
Mis penas, mi suciedad.
Mi orgullo.
Caen, si es que caen.
-aprendimos a verlo así.-
Quizás solo regresen.
Dejando el resabio de un mar irreconocible.
F.V.
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