Quizas fue en ese momento, viendo la sombra de su rostro junto a la maquina de escribir. Oyendo correr el agua del baño. No, no todo era silencio. No, al contrario. El insoportable ruido debilitaba su impulso. Aferraba el vaso una y otra vez. Creaba imagenes en el vacio. Cientos de finales, ningun comienzo. El cigarrillo descansando frente a la hoja.
Se alejaba, se intuia, se crispaba. Si, por dentro se crispaba. Sin embargo era la paz, pero no lo era. Ella no podia, no debia tal vez, conducir su escritura.
Enesmitado de la musica, tan solo garabateaba sobre el lienzo. Su mano seduciendo el papel. Recordando esa noche cercana, junto a ella, en el silencio, en la impotencia.
Voces que llegan entre las endijas de la persiana. Y el silencio cada vez mas amenazante. Si, tan solo otro trago, el ultimo quizas.
Se incorpora, encuentra su reflejo, no se reconoce, ¿es el espejo quien transfigura su imagen?
Cenizas sobre el papel que se desprende suavemente.
La puerta apenas perfilada le inspiraba un temor irracional
Creia verla entre las sabanas durmiendo junto a él. Tan solo respiraba, era suficiente. Pero esa luz en enceguecedora lo traia una y otra vez a la realidad, ¿la realidad?, la soledad.
El dibujo se conforma frenético y apacible sobre la hoja. El caos creando unidad y existencia a su paso. ¿Podría seguir? No lo se. Aunque en realidad si. Y si, pero Quizas no. El último cigarrillo y el último trago. Y el teléfono silencioso acompañándolo, conteniéndolo.
Sabia que le quedaba poco tiempo. Si, agazapada entre las sombras detrás de la puerta. Quizas ya había entrado. Pero la música nunca se habia apagado. La película aun no terminaba. Él continuaba. Quizas en otro tiempo, ya no en otro espacio. Talvez en ninguno o en ambos a la vez, ¿importaba acaso?
Era el.
¿Era él?
No lo se. Pero ahi estaba.
¿Existía?
Tantas preguntas y tan poco movimiento.
Quizás era hora de apagar la luz y recostarse a su lado...
P.M.
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2 comentarios:
me encantó este texto pablo. no voy a decir por qué ahora, ya que es tarde y me resulta imposible articular razones. pero lo podemos comentar cuando nos veamos.
Juega con el misterio. Hasta donde dice "se incorpora" no se sabe si el personaje es el mismo que escribe o es un tercero. Luego se empieza a ver el bosquejo de una imagen, que se interrumpe nuevamente con la confusión entre la compañía de algo que no se explicita o la soledad. La música de la que se enemistaba no se había apagado. Una película que ignoramos no ha terminado. El tiempo y el espacio se confunden. La incertidumbre entonces se corta no con respuestas sino con la luz que se apaga y con una compañía que quizás no es nada. Es un texto extraño, disparador para reflexionar pero intranquilizador. Para quien quiera certidumbres será aburridísimo.
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